¡Hola querido lector! tienes que “Hacer caso“, muchos hemos oído esta frase alguna ves, incluso algunos dirán que “soy mal hablado” por decir ¡Hacer caso! cuando debería decir ¡Sé obediente! pero la razón del porque utilizo esta frase es porque es la que escucho a diario en mi país, en mi barrio, en mi casa, de mi abuela, de mi madre ¡En fin! esta reflexión al igual que las anteriores reflexiones de amor, quiero que sea al estilo de mi gente ¡Has caso muchacho! ¿Quién no ha oído ese término? entrando ya en el tema reflexionemos:
¿Qué es hacer caso? ¿Cuál es su significado?
¡Hijo haga caso, no se lo digo por mal, no ande por esas calles tan tarde – Att. Tu Abuelita…
Esta frase tiene variedad de significados que nos puedes llevar a una conclusión, significa «Oír» «Prestar atención» y «Tener en cuenta» lo que nuestra abuelita nos dijo, es decir no debemos andar por esas calles tan tarde. Es un ejemplo muy simple, a cuantos no nos dijeron algo así y por no obedecer terminamos mal, y lo triste es que aún después de tener tantas experiencias como estas nos negamos atender esos consejos que deberíamos atender hoy día.
¡Muy bien! ¿Pero debo hacer caso a todo?
No, no siempre, porque aunque se ven muy tiernas las palabras de la abuelita no siempre ellas tienen la razón, e incluso no siempre es la abuelita que nos aconseja, y esto nos lleva al siguiente punto con la siguiente pregunta seguida de otra ilustración.
¿A quién debo hacer caso?
¡Vamos chica! Sólo será un ratico y la pasaremos muy bien – Att. El novio de una chica que quiere tener relaciones sexuales con ella…
Así como estas frases hay muchas, es obvio que no a todo debemos obedecer, pues hay cosas que no son tan convenientes. Pero si salimos de esos ejemplos típicos donde involucramos solamente casos de jóvenes podremos darnos cuenta de una gran verdad ¡Continuemos!
¿Qué tan incomodo o qué tanto frustra que no te hagan caso? mucho verdad, así como tu no te sientes bien cuando tu hijo(a) no te obedecen, cuando tu hermanos o sobrinos hacen caso omiso cuando hablas, así como te preocupan las consecuencias que pueden tener otras personas por ignorar tus consejos, así es la posición de Dios cuando desobedeces o no haces caso a lo que él te dice.
Hice hincapié en utilizar esta frase como sinónimo de obediencia porque muchas veces vemos a Dios sólo como Dios y no como un Padre, y me gustaría que nos pusiéramos en su lugar como Padre, como cuando en ese barrio donde vives le dices a tu hijo «Muchacho has caso, mira para arriba y para abajo antes de cruzar la calle», «Hijo no le abras la puerta a cualquiera, hazme caso», «Esto no te conviene ¡Estudia!», etc. ¿Cuantas veces en tu casa con tu lenguaje has dicho frustrado «Este muchacho no me hace caso ¡No se que hacer!»? yo creo que te ha pasado muchas veces.
Dios a cada momento te dice que lo obedezcas, que mires en quien confías, que no le abras la puertas de tu vida al mal, Él te dice lo que no te conviene y lo que si te conviene ¡Y no lo hace solo en este momento! lo ha hecho durante muchos años ¿Qué esperas para obedecerle? ¡Perdón, sigamos con nuestro lenguaje! ¿Qué esperamos para hacerle caso?
Para finalizar quiero decirte que ese ejemplo de la abuelita es Dios diciéndote que lo que él quiere para ti no es nada malo, Él no quiere que andes por caminos oscuros y peligrosos y solo te pide que le obedezcas. Mientras que el otro ejemplo ya sabes a quien representa, a ese que te ofrece placer por un momento sin medir las consecuencias para luego abandonarte y destruirte ¡Debes hacer caso!. Mira nuestro consejo:
“Mi consejo para ti principalmente es que debes aprender «Hacer caso a Dios» es decir, debes oírlo, prestarle atención y tener en cuenta lo que Él te dice. Si quieres que tus hijos te obedezcan comienza tú por obedecer a Dios, en esa obediencia de seguro encontrarás lo que necesitas para que tu familia entre en obediencia. Te invito a comentar tu opinión ¡No te quedes en silencio! ¿Qué significa hacer caso para ti? ¡Bendiciones!”
Hola
¿Sabes?, en la actualidad se educa a los hijos, no en base a nuestros propios actos, se les dice, yo lo hago, pero está mal, tú no debes hacerlo y entonces esos niños tienen cierto caos mental y también rebeldía, ¿por qué tú si y yo no?, tarea complicada les ponemos.
Creo que más que enseñarles a obedecer, deberíamos enseñarles a reflexionar y decidir qué es lo mejor para ellos, no lo que nosotros creemos que lo es, porque al final, es su vida y la nuestra y se les guía, pero también se les enseña que tienen libre albedrío para construir su propio camino.
Recordemos que, si no conocemos la oscuridad, nunca sabremos apreciar la luz.
Un abrazo
Gracias por tu comentario, tienes mucha razón es como el dicho «Decirle a tu hijo que no fumes, cuando tienes un cigarro en la boca» Gracias por tu comentario, he leído lo que escribes y me gusta, me encantaría que me dieras tu opinión acerca de las reflexiones de amor, esta entre los post mas populares, la de la imagen roja ¡Abrazos!