Todos debemos tener una relación íntima con Dios. Es decir una relación de mucha confianza y personal, donde se hablan cosas que no con cualquiera se habla, donde se hacen cosas que no con cualquiera se hacen. En este devocional te quiero compartir un mensaje, así que sigue leyendo.
Relación intima con Dios (Devocional Cristiano Jueces 1:1)
Josué 1:1
Después de la muerte de Josué, los israelitas le preguntaron al Señor:
—¿Quién de nosotros será el primero en subir y pelear contra los cananeos?
Un versículo que parece no parece decir mucho, pero hay algo interesante y es que muestra a Israel como un pueblo que se comunica con Dios, después de la muerte de Josué, la persona que los lideraba y de cierto modo era intermediario entre Dios y ellos. Esto habla de una relación íntima con Dios.
Es decir, que a pesar de que la persona que te lideraba, oraba por ti… ya no está, igual tienes la capacidad de consultar a Dios. Y así debemos ser nosotros. Te pregunto, si la persona que te lidera, esa a la que acudes para orar juntos o que ore por ti… por cualquier motivo ya no puede acompañarte (se apartó de Dios, está en otro lugar y ya no puedes hablar con él, etc) ¿Cómo sería tu comunión con Dios?
Relación íntima con Dios ¡El nivel que debemos procurar!
Tenemos que llegar a un nivel en que nuestra comunión con Dios sea tan íntima que no dependa de terceras personas. Puede que estés solo, pero entenderás que allí está Dios para ti, pueden decepcionarte tus líderes pero allí está Dios que no te decepciona. Es necesario que hoy comencemos una relación más íntima con Dios.
- Habla directamente con Él (no está mal que otros oren por ti, pero si no lo hacen no importa tu igual lo haces).
- Cuéntale como te sientes, recuerda que es una relación íntima con Dios, así que no te avergüences. Dile lo que has hecho, tus pecados, cuenta tus sueños, lo que quieres alcanzar, tus debilidades, si tienes miedo ¡Sé lo más transparente y sincero con él!
- Que esa comunicación con Él sea constante. Día y noche. Aunque debes tener espacios solo para Él como orar en la noche o de madrugada en tu cuarto en intimidad, es importante que estés conectado con el durante todo el día. Es decir, si viene un pensamiento malo mientras vas camino al trabajo, di algo como “Señor quita de mi este pensamiento, ¿Por qué pienso esto?, ayúdame no quiero fallarte”. Que el Señor sea el centro en todo momento.
Señor te doy muchas gracias porque siempre estás ahí para escucharme, eres de confianza, no me fallas porque eres 100% fiel. Si hay alguien con quien se puede tener intimidad es contigo. Te pido me inquietes si en algún momento dejo tener esa intimidad contigo, recuerdame que no hay mejor cosa que estar conectado contigo. Te amo Señor, muchas gracias en el nombre de Jesús ¡Amén!