Este texto bíblico Deuteronomio 6:6-7 es muy interesante, espero que este devocional corto te sea de mucha ayuda.
¿Qué dice el texto bíblico Deuteronomio 6:6-7?
Grábate en el corazón estas palabras que hoy te mando. Incúlcaselas continuamente a tus hijos. Háblales de ellas cuando estés en tu casa y cuando vayas por el camino, cuando te acuestes y cuando te levantes. – Deuteronomio 6:6-7
Antes de continuar con nuestro devocional te comparto un post para que lo leas luego, te puede ser de mucha ayuda: Oración para desear buen viaje – Hijos, Familiares y Amigos
Hablar de la palabra a tus hijos
Este texto es muy utilizado para hablar de nuestro deber de hablar y enseñar a nuestros hijos acerca de la palabra de Dios. Pero hay algunos puntos que debemos considerar antes, y que están en este texto:
- Grabar estas palabras en nuestro corazón, debemos creerla profundamente, sino nuestra enseñanza será menos efectiva.
- Hay que inculcarla continuamente, no solo una vez cada semana ¡Tiene que ser frecuentemente!
- No importa el lugar donde estés, siempre hay lugar para enseñara nuestros hijos. Y eso no solo habla de sacar la biblia y hablar, sino también con nuestro ejemplo en cualquier lugar que vayamos.
¿Quieres enseñar mejor a tus hijos acerca de la palabra? Entonces haz estas 3 cosas: Cree en tu corazón la palabra que enseñas, habla en todo momento de ella a tus hijos, y sin importar donde te encuentres enseña con el ejemplo.
Lee lo siguiente luego: Versículos sobre la Familia Unida en la Biblia
Oremos juntos
Oremos por el texto bíblico Deuteronomio 6:6-7 – Padre te pido que me ayudes a grabar tu palabra en mi corazón, la creo desde lo más profundo de mi ser, te pido que tu Espíritu Santo me pueda convencer cada día.
Dame sabiduría para enseñar correctamente a mis hijos, que me puedan escuchar, y dale sabiduría a ellos para que puedan comprender. Que tu Espíritu Santo los puedas guiar al recibir cada palabra.
Hoy me comprometo a ser obediente a tu palabra en todo lugar, primero para agradarte porque te amo, y segundo para ser un buen ejemplo para mis hijos, en el nombre de Jesucristo ¡Amén!